Es cierto que la publicidad y el marketing no han sido términos asociados a la ética de manera general. Sin embargo, la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) ha calado en nuestra sociedad hasta tal punto que la comunicación también se ha impregnado de ella.
Ya en 2001 la Comisión Europea describía en su Libro Verde la RSE como un concepto por el que “las compañías deciden voluntariamente contribuir a una mejor sociedad y a un ambiente más limpio… Ser socialmente responsable no significa solamente cumplir plenamente las obligaciones jurídicas, sino también ir más allá de su cumplimiento, invirtiendo más en el capital humano, el entorno y las relaciones con los interlocutores”. Para leer más sobre RSE, puedes ver este post que ya publiqué.
También es interesante el encuentro sobre RSE que se va a celebrar en Castellón del 3 al 5 de abril de 2014. Se trata del I RSEncuentro, que nace con la filosofía de que “la Responsabilidad Social real sólo es posible desde la corresponsabilidad, si remamos todos en la misma dirección y creamos el ambiente social propicio para que empresas y ciudadanía puedan actuar de un modo justo y se vean recompensados por ello”.
Partiendo de esta base, todas las acciones de una empresa deben asumir su responsabilidad con la sociedad. Por ello, las acciones de comunicación de cualquier compañía no deben pasar por alto este aspecto. De ahí la importancia de contar con una comunicación responsable en toda compañía que se precie. Dicho de otro modo: el contenido ético y social propio de las prácticas de la RSE debe integrarse también en las campañas de comunicación.
Además, y visto desde el punto de vista empresarial, esta estrategia es una ventaja importante, puesto que la comunicación responsable genera reputación corporativa y fortalece a la compañía.
Estamos hablando, por tanto, de un “deber” y un “beneficio” ya que, para ser socialmente responsable, una compañía debe contar con una comunicación real y fluida que genere en su público una imagen positiva. La clave para conseguirlo: transparencia, responsabilidad y solidez. Nada de “lavado de imagen” de cara al exterior. Y es que las prácticas de comunicación responsable tienen un gran potencial: pueden fortalecer o debilitar la reputación de una empresa y su marca, dependiendo de cómo se gestionen. Juanjo Manzano ya nos habló en este mismo blog sobre “Errores de comunicación en una empresa con RSE”.
Por su parte, acciones positivas para conseguir una comunicación responsable pueden ser:
- Determinar cuáles son los criterios de sostenibilidad y responsabilidad social de la marca para poder comunicarlos al público.
- Crear códigos de conducta para garantizar una comunicación ética.
- Aunar un diseño creativo, una estrategia bien definida y un código de conducta para ejecutar cualquier campaña de comunicación.
- Responder al código ético, de responsabilidad social y medioambiental de la propia empresa.
- La publicidad, el diseño y las acciones de comunicación deben ejecutarse siempre de la forma más sostenible posible.
- El objetivo debe ser posicionar la marca con criterios de sostenibilidad y responsabilidad social corporativa, para ofrecer una imagen que vaya más allá del cumplimiento de las leyes y las normativas relacionadas con el medio ambiente de la empresa.
- Si además damos respuesta a un reto social, nuestro desempeño como responsables de la comunicación es aún más positivo ya que convertimos nuestro trabajo en un ciclo virtuoso que auna resolución y comunicación.
Por otra parte, también es lógico pensar que para que pueda llevarse a cabo una campaña de comunicación responsable, la firma debe llevar a cabo prácticas socialmente responsables, ya que, para comunicar buenas acciones y ofrecer credibilidad, la información debe sustentarse en acciones reales y no solo en buenas intenciones. Es lo que cuenta José María Batalla en su libro “Las marcas buenas venden más”, del que también hablé en un post anterior.
En definitiva, las campañas de comunicación responsable son imprescindibles en una empresa socialmente responsable para cerrar el círculo de este proceso de implicación con la sociedad.
Desde Alma Natura hemos realizado proyectos de comunicación con conciencia desde una perspectiva socialmente responsable y atendiendo a necesidades que imperaban en la sociedad de forma claramente destacada como es el caso que muestro a continuación (desempleo juvenil). Renault Dacia colaboro en la formación de jóvenes del Norte y Sur de España mediante esta iniciativa para emprendedores verdes y sociales denominada #hazquesuceda. El resultado del trabajo de meses fue este video que fue compartido por miles de personas en Redes Sociales principalmente.