Hoy 9 de Junio de 2016 son muchos los centros educativos que se afanan en terminar los exámenes, poner la calificaciones y cerrar un curso escolar con sus luces y sombras, un curso escolar que comenzó en el mes de Septiembre y que llegados a estas fechas el nivel de saturación y agotamiento de maestros, profesores, alumnos y padres es más que evidente.
Escribo este post con la ilusión que el próximo año en Septiembre, cuando el claustro de profesores y el consejo escolar de algún centro de la geografía española se reúnan para planificar el nuevo curso escolar 2016/17, piensen que hay otra formar de llegar al final de curso y que hay otra forma de planificar y hacer participe a la comunidad educativa.
Desde siempre me ha gustado conocer otros modelos educativos -será que me forme como maestro y creo firmemente que la educación lo puede cambiar todo- y desde hace tiempo sigo todo el trabajo de transformación social que desarrolla Ashoka a través de su Red de Escuelas Changemakers, un movimiento global que pone en el mapa aquellos centros que están sirviendo como motores de cambio y que están proponiendo otra forma de educar, centros que están formando a los futuros agentes de cambio.
¿Qué características debe tener una Escuela Changemakers?
Aunque os sorprenda para ser una escuela changemakers no es necesario un gran presupuesto, tampoco ser un colegio privado con los mejores alumnos/as tan sólo se necesita tener una comunidad compuesta por maestros/profesores, padres/madres y alumnos/as implicados en un mismo propósito; formar a las mejores personas para crear un mundo mejor. A continuación desgloso aquellos ingredientes que se repiten de una u otra forma en todos los centros considerados modelos por su metodología y por sus resultados:
- Su propósito es crear mejores personas para un mundo mejor. El propósito educativo va más allá de almacenar conocimiento, aunque evidentemente es importante, este llega como consecuencia de un buen ambiente escolar, del respeto entre alumnos/as y profesores y donde todos se sientes felices de ir al centro escolar.
- Metodología “learning by doing”. Aprender mediante el desarrollo de proyectos experienciales a la vez que todos se responsabilizan del día a día del centro: normas de convivencia, trabajo para la inclusión e integración de todos los alumnos/as, en definitiva experimentan y se preparan para la vida real fuera de la escuela.
- Abrir el centro a la comunidad. El centro es el nexo de unión de toda la comunidad en la que todos tienen un papel importante en la consecución del propósito. Nos referimos por comunidad a docentes, alumnnos/as, padres/madres y entidades locales cercanas al centro (ayuntamiento, centro de mayores, asociaciones sin ánimo de lucro, …). Todas suman en mayor o menor medida para formar a la mejores personas para un mundo mejor.
- Centros academicamente excelentes. Cuando invertimos en factores de aprendizaje y priorizamos valores como conviviencia, respecto, solidaridad, compañerismo y colaboración entre otros, el resultado y la consecuencia del proceso es alumnos motivados y abiertos a aprender nuevos conocimientos y a ser más productivos en la asimiliación de contenidos. Esto viene siempre como consecuencia de haber trabajado concienzudamente la base, en ningún caso priorizando los contenidos por encima de sus preocupaciones o problemas emocionales.
- Equipos docentes en continuo aprendizaje. Profesionales que se sienten valorados y que asumen la responsabilidad de formar a las mejores personas para el mundo. Para ello, están dispuestos a formarse y actualizarse en nuevas herramientas que permitan a los alumnos/as descubrir nuevos retos y puedan acompañarlos en el proceso de una forma exitosa para todas las partes.
- Modelos abiertos y replicables; los centros changemakers están abiertos a mostrar su trabajo a otros centros, el objetivo es que el modelo se replique y adapte en otros centros educativos. Los centros changemakers se convierten en motores de cambio dentro del sistema educativo.
Ejemplos de Escuelas Changemakers en España
Llegados a este momento me gustaría mostraros 3 ejemplos muy diferentes pero muy inspiradores, tres ejemplos de centros públicos españoles (alguno de ellos de ámbito rural) con realidades diferentes pero que desde su entorno trabajan para formar a esos futuros agentes de cambio.
CEIP Ramón y Cajal- Alpartir (Zaragoza) – Escuela rural.
CEIP La Biznaga (Málaga) – Escuela Democrática y abierta a la comunidad.
Institut de Sils – Sils (Girona) – Instituto de Secundaria que surge tras la frustración del equipo docente.
Después de conocer estos centros, sin duda podemos decir que con implicación de todos es posible obtener mejores resultados y formar a mejores personas, tan solo tenemos que estar abiertos a nuevas metodologías y a salir de nuestra zona de confort como alumnos, docente y padres, es responsabilidad de todos.
Estoy seguro que conoces algún centro con un perfil similar a los que te he mostrado y seguro que no conoce el movimiento changemakers, si es así en este enlace puedes nominar al centro y hacer que cada vez más centros se sumen a esta nueva forma de educar. Más info: Nominación centro escolar.
¿Te interesa conocer otras iniciativas educativas innovadoras?
Foto Destacada: Pexel