El “No Turista”

Nunca me gusto sentirme turista allá por donde viajé, siempre me gusto sentirme como uno más. Eso si, que difícil es ir de vacaciones y no sentirse turista. Recuerdo mi primera experiencia de “No turista”, está fue en el Camino de Santiago (cuando este no era tan comercial como lo es ahora, claro) en una pequeña aldea donde nos acogió una aldeana y nos dio de comer. La experiencia fue única, irrepetible y sobre todo auténtica.

En la actualidad las personas que llevan años viajando a ciudades de todo el mundo, buscan cada vez más esas experiencias únicas e irrepetibles. Experiencias difíciles de encontrar dentro de toda la oferta masiva en agencias de viaje o webs especializadas de todo el mundo.

Algunos tipos de turismo…

• Turismo “masivo” o “convencional”. Representa la forma tradicional de viajar. No se evalúan impactos ambientales ni impactos socioeconómicos sobre el destino.
• Turismo sostenible. Tiene en cuenta y busca la sostenibilidad tanto ambiental como socioeconómico del destino. Objetivo convertir el turismo en una fuente económica para promover su desarrollo sostenible.
• Ecoturismo. Viajes a espacios naturales y rurales en los que se promueve producir un bajo impacto en la zonas e impulsa la participación activa en las tareas agrícolas de la población local.

A grandes rasgos estos serían los tipos de turismo identificados, si es verdad que en los últimos años han aparecido conceptos como turismo slow, turismo responsable (El que desarrollamos desde Alma Natura) que no dejan de ser un paso más en la búsqueda de disfrutar de un destino sin sentirse Turista. Si además sumamos la tematización de cada destino buscando la singularidad y diferenciación, los tipos de turismo se multiplican.

Pero, ¿Cómo hacer para no sentirse turista?

Os dejo aquí con algunos consejos para disfrutar mucho más del destino:

1. A la hora de reservar el alojamiento sal de agencias de viajes o webs y busca alojamientos donde puedas realizar la reserva directamente con ellos. Busca que haya un trato cercano y familiar. Hospédate en apartamentos o en casas de familia.
2. Viaja sin prisa, intenta pasar tiempo en el mismo lugar para poder visitarlo en profundidad.
3. Degusta productos locales (Acude a restaurantes de comida local para gente local) y participa en eventos locales.
4. Habla con la población local y pide consejos sobre lugares y costumbre de la zona.
5. No busque lo recreado en un destino, busca lo auténtico y original.
6. Déjate llevar e intégrate en el destino dándole un respiro a la cámara de fotos. Ya me entientes.
7. Muevete en transporte público escapando del circuito turístico. ¡Busca Greeters!
8. Intenta hablar su idioma.
9. Y para terminar esta frase que me ha inspirado: “El turista no sabe dónde ha estado. El viajero no sabe dónde va”. Paul Theroux

Otros Recursos:

Red Estatal de Municipios para la Calidad de Vida.

Instituto de Turismo Responsable.

Red Verde de Turismo Rural Responsable.

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