Hace unas semanas compartíamos contigo por qué el emprendimiento femenino es esencial para mantener un medio rural vivo.
Pues bien, hoy queremos demostrártelo con el ejemplo de dos emprendedoras sociales participantes en GIRA Mujeres, que han logrado sacar adelante dos proyectos innovadores y socialmente responsables desde el mundo rural.
Camino Montañés y Vivirtual: estimulación cognitiva para mayores
Camino Montañés es psicóloga y lleva trabajando con personas mayores desde el inicio de su carrera. Primero, como voluntaria y, después, de manera profesional en centros de día y residencias.
En su primer trabajo en un centro de mayores, Camino se dio cuenta de que, a la hora de trabajar con personas sanas o con algún tipo de demencia, el método a seguir no había variado en décadas: el equipo de psicología trabajaba con sus pacientes utilizando las mismas fichas de papel que hacía 30 años.
Ese fue el inicio de una idea: “empecé a darle vueltas a cómo podría hacer algo más lúdico, interesante y motivante tanto para los usuarios finales como para los profesionales”.
De ahí surgió la semilla de su proyecto actual Vivirtual: una empresa que utiliza la realidad virtual para, por un lado, fomentar la parte lúdica en las personas mayores (por ejemplo, haciendo que puedan “viajar” hasta su pueblo o conocer ciudades en otros lugares del globo) y por otro, obtener información sobre la atención o la memoria de esas personas.
Camino comenzó su andadura en Benacazón, un pueblo sevillano desde el que participó en GIRA Mujeres cuando su proyecto era poco más que una idea.
“Gira Mujeres me ayudó a entender los cimientos de la empresa y validar la idea de negocio. A mí me sirvió, aprendí muchísimo. Fue la base para iniciar un recorrido que ya lleva 4 años porque empecé modelando mi idea y, a día de hoy, tenemos una empresa y estamos trabajando en sectores públicos y privados llevando experiencias de realidad virtual a personas mayores de las ciudades, pero sobre todo de los pueblos. Yo estoy muy contenta y muy satisfecha”.
Marleen, de Ladrón de Miel: un proyecto para poner en valor la apicultura
Marleen tuvo la idea de su negocio pedaleando.
Durante un viaje en bicicleta desde Tailandia hasta Sevilla, esta alemana conoció a varios apicultores y empezó a descubrir el mundo de las abejas.
Cuando llegó a su destino tuvo dos cosas claras: la primera, que la apicultura le fascinaba; y lo segundo, que quería vivir cerca de la naturaleza.
Ese fue el germen de Ladrón de Miel, un proyecto de apicultura solidaria que acerca la apicultura a las personas través de una tienda online de miel, visitas a colmenares, apadrinamientos de colmenas y educación ambiental.
Como ella misma explica: “ponemos cara a la miel identificando al apicultor que ha producido cada tarro”. De esta manera, las personas conocen quién hace su miel, dónde y la compran pagando un precio justo para quienes la producen.
A pesar de lo original de su iniciativa, Marleen reconoce que emprender en el pueblo no siempre es fácil. Ella comenzó su negocio en El Gastor, uno de los pueblos blancos de la Serranía de Cádiz, al abrigo de las montañas de Grazalema.
Allí, Marleen no se encontró con muchos emprendedores de los que aprender y con los que compartir su experiencia.
Por eso, cuando descubrió GIRA Mujeres, supo que en el programa estaba la comunidad que buscaba. Y decidió unirse.
“Lo que más aprecié, aparte de la fuerte comunidad con las otras emprendedoras, fue la profesionalidad de las formaciones. Las tutoras tenían un conocimiento real sobre emprendimiento basado en su propia experiencia. Me motivaron mucho y aprendí muchas cosas valiosas para seguir mi propio camino”, cuenta.
Tanto es así, que Marleen llegó a ser finalista del proyecto, algo que se nota en su filosofía de trabajo: “Siempre hay que seguir mejorando. Cada semana intento preguntarme qué funciona en Ladrón de Miel y qué no. Con GIRA aprendí a trabajar mucho en la marca, sin perder la perspectiva de cómo los otros perciben el proyecto. Ya lo he recomendado a otras mujeres en otros pueblos que también quieren emprender”.
Las historias de Camino y Marleen: el poder del emprendimiento femenino en el mundo rural
Con el apoyo de GIRA Mujeres, Camino y Marleen han podido desarrollar sus ideas y hacerlas viables en el mundo rural.
Una senda esencial si queremos lograr un medio rural vivo, rico, diverso e igualitario.