Día de las Mujeres Rurales: las agricultoras y ganaderas son clave para acabar con el hambre

Las mujeres rurales dedicadas a la agricultura y la ganadería suponen una buena parte de la mano de obra. Su trabajo, a veces invisibilizado, podría ser clave.

La contribución de las mujeres rurales podría ser determinante en la consecución uno de los ODS más ambiciosos y necesarios: Hambre Cero. Sin embargo, la desigualdad lastra esta valiosa labor, en el mundo y en España. 

Con motivo del Día Internacional de las Mujeres Rurales analizamos la situación de las agricultoras y ganaderas y cómo los programas como GIRA Mujeres pueden elevar proyectos agrícolas liderados por mujeres. 

La contribución de las mujeres rurales: “decisiva” 15 años después

El 18 de diciembre de 2007 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaraba que cada año, el 15 de octubre, se celebraría el Día Internacional de las Mujeres Rurales. En aquella declaración se reconocía “la función y contribución decisivas de la mujer rural, incluida la mujer indígena, en la promoción del desarrollo agrícola y rural, la mejora de la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza rural”

En 2022, cuando este día se celebra por decimoquinto año, el reconocimiento a la importancia de las agricultoras y ganaderas para erradicar el hambre sigue tan vigente como en 2007 a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Las mujeres rurales en el mundo: clave para erradicar el hambre 

Según datos de las Naciones Unidas, las mujeres rurales suponen el 25% de la población mundial y el 40% de la fuerza laboral agrícola en los países en desarrollo. En los países más pobres, esta cifra incluso supera el 50%. 

Sin embargo, menos del 20% de los propietarios de la tierra son mujeres. 

La desigualdad que sufren en cuanto a acceso a la tierra, la tenencia, el cultivo, o acceso a créditos, les afecta a ellas directamente, pero también a la situación del hambre en el mundo. 

En 2011 la FAO ofrecía los siguientes datos en el informe Las mujeres en la agricultura: cerrar la brecha de género en aras del desarrollo

  • Si las mujeres tuvieran el mismo acceso que los hombres a los recursos productivos, la productividad de sus tierras aumentaría entre un 20 y un 30%. 
  • Con esta mejora, la producción agrícola de los países en desarrollo aumentaría entre el 2,5 y el 4%.
  • Y todo esto reduciría entre un 12 y un 17% el número de personas que pasan hambre en el mundo.

En un contexto en el que casi el 9% de la población mundial padece hambre, el peso de la mujer rural, agricultora o ganadera, en la consecución del segundo ODS: Poner fin al hambre, es fundamental. 

Las mujeres rurales en España: lejos aún de la igualdad

Nos movemos a España para analizar cuál es la situación de las mujeres rurales que se dedican a la agricultura y la ganadería. 

El último Censo Agrario nos pone al día de la situación. Esta herramienta, que se actualiza cada 10 años, es muy relevante para la toma de decisiones políticas y para el seguimiento de los ODS. 

Según los datos de 2020

  • Solo el 28,6% de los jefes de explotación en España son mujeres.
  • Regiones como Galicia son la excepción: allí la cifra es del 48%, llegando a superar las mujeres a los hombres en algunos lugares.
  • La franja de edad con más mujeres jefas de explotación es la de 55 a 64 años, donde el porcentaje es mayor del 30%. 

Pero, ¿qué quiere decir ser jefa de explotación? Según la definición del propio Censo Agrícola, es “la persona física responsable de las actividades financieras y de producción, corrientes y cotidianas de la explotación agrícola”

Una jefa de explotación es la responsable, por tanto, de la toma de decisiones en lo que se refiere a la explotación agrícola o ganadera. Serlo o no serlo, entonces, no es un tema baladí. 

La situación de las mujeres rurales en el campo español, pese a ser mejor que la de las mujeres en el mundo, dista mucho de ser ideal. 

  • La titularidad de la tierra sigue siendo minoritaria

En España las mujeres también se enfrentan a la desigualdad en cuanto a titularidad de la tierra. Históricamente las mujeres que trabajaban en explotaciones familiares han estado englobadas dentro de la categoría de “ayuda familiar”, siendo el hombre el titular de la tierra, aunque ellas suponen el 30% de la mano de obra de agrícola

Desde la Ley 35/2011 de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, las mujeres pueden ser cotitulares de la tierra, lo que visibiliza su trabajo, además de reconocer otros derechos. 

La evolución de las fincas en régimen de titularidad compartida en España ha ido aumentando paulatinamente en los últimos 10 años, y en julio de 2022 alcanzó la cifra de 1.031 fincas

  • Muchas tareas invisibles siguen sin ser reconocidas

Las mujeres rurales también llevan sobre sus hombros otras tareas invisibles, fundamentalmente domésticas y de cuidados. En este artículo ya te contamos las razones por las que el techo de cristal es doblemente grueso para las mujeres rurales

Uno de los objetivos que persigue la titularidad compartida de la tierra es visibilizar el trabajo de las mujeres agricultoras y ganaderas en fincas familiares, algo que de otra manera podría no salir a la luz. 

En AlmaNatura hay sitio para los emprendimientos agrícolas

Sabemos que no todas las mujeres rurales trabajan en la agricultura o la ganadería, pero este tipo de emprendimientos también son muy bienvenidos en los proyectos que realizamos en AlmaNatura.

Algunas de las mujeres que han participado en nuestros programas de formación y emprendimiento social rural han venido con proyectos agrícolas bajo el brazo. 

Es el caso de María José Fernández Llamas, viticultora y enóloga, que desde 2012 trabaja en su propio negocio vitivinícola y que formó parte de GIRA Mujeres.

Tras más de una década de trabajo, en junio de 2022 fue galardonada con el premio a la Mujer Empresaria del Año del II Premio AMEP “Mujeres que suman”. 

Ella aúna su emprendimiento agrícola con labores de docencia y, según contaba en esta entrevista de 2021, en sus viñedos aplica criterios de producción ecológica. 

En AlmaNatura conocemos la importancia del sector agrícola y ganadero como motor económico y social del medio rural. 

Holapueblo también ha sido testigo del nacimiento de proyectos agrícolas liderados por mujeres, como Sweet Celi.  Poder apoyar a proyectos como estos es una satisfacción.

Las mujeres rurales pueden cambiar el mundo con sus emprendimientos agrícolas. Las cifras estudiadas por la FAO y las Naciones Unidas demuestran que su participación en el cultivo y producción de alimentos es clave para reducir el hambre en el mundo. 

Tu entidad puede ayudar a mujeres rurales a emprender en la agricultura.
En AlmaNatura te ayudamos a lograrlo.
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