Vivimos tiempos convulsos. Al miedo al contagio de los primeros meses de pandemia también se le suma la incertidumbre socio-económica de muchas familias. Hemos pasado por un rebrote y se habla ya de la tercera ola, ¿será la protagonizada por la falta de salud emocional?
La COVID-19, según alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS), está y seguirá teniendo un fuerte impacto sobre la salud emocional y mental de la población. Las situaciones de confinamiento, el aislamiento social, la pérdida de seres queridos, los eventos traumáticos y la crisis económica están suponiendo un reto enorme desde un punto de vista de bienestar emocional, que hay que afrontar y poner en el centro de las políticas públicas.
Para aliviar esta situación, desde AlmaNatura formamos parte —junto a casi una veintena de entidades— del programa liderado por Coca Cola, ‘Todo irá a mejor‘. Estamos trabajando a nivel rural en el cuidado del bienestar de dos grandes colectivos afectados por la situación pandémica: las mujeres y la hostelería.
A través de la organización de encuentros online, trabajamos con grupos de mujeres mayores de 14 años de hasta 60 municipios distribuidos entre las provincias de Badajoz, Cuenca, Huelva y Sevilla para concederles un espacio de desahogo emocional en el que puedan compartir sus inquietudes y miedos, además de dotarlas de herramientas de gestión emocional con la compañía de una de nuestras facilitadoras.
En paralelo, el apoyo al sector hostelero local se consigue a través de la elaboración de un menú degustación para aquellas mujeres del municipio que se inscriben al taller. Para evitar reuniones, cada mujer recoge del propio establecimiento su menú, para luego degustarlo mientras sigue la sesión grupal online a través de su móvil u otro dispositivo. También se pone el foco en la sostenibilidad, invitando a que cada mujer acuda con su propio recipiente y bolsa para la recogida del menú, reduciendo así el uso de plásticos de un solo uso.
Desde que iniciamos los talleres el pasado mes de noviembre, está aflorando el déficit de atención sobre el cuidado del bienestar de las personas:
- El autocuidado: son constantes los testimonios de las mujeres que manifiestan la falta de tiempo para ellas mismas. Poner en práctica el autocuidado nos ayuda a promover pensamientos más positivos y a potenciar una mejor relación con uno mismo, lo que mejora considerablemente la autoestima.
- El apoyo entre iguales: además de cuidarte a ti mismo, es importante cuidar las relaciones con los que nos rodean para gozar de bienestar emocional. En los talleres en los que convocamos a vecinas del mismo municipio, están comprobando que uniéndose pueden aliviar su dolor emocional, además de encontrar una compañera con la que hablar libremente de sus emociones a través del trabajo empático que se realiza durante la sesión.
El abrirles la ventana digital a través del manejo de herramientas de comunicación, como Zoom, les permite mantener la conexión entre las participantes y que ellas puedan usarlo para seguir en contacto con sus familiares y evitar el aislamiento social.
- Vivir el presente: la tan sonada frase “volver a la normalidad” está mermando el bienestar de las mujeres que atendemos y que se suma al pesar generalizado. Hay una gran inquietud sobre qué va a pasar, cuándo se recuperará la estabilidad sanitaria que está impidiendo disfrutar de los grandes logros del día a día.
Centrémonos en esos momentos que siempre han estado ahí para tomar conciencia del aquí y ahora que vivimos en nuestro día a día.
Para AlmaNatura, este ilusionante programa suma coherencia a nuestro propósito, pues la salud es uno de los cuatro ejes de ejecución para conseguir la mejora de la calidad de vida de las personas que viven en zonas rurales.