Ya está aquí. Para muchos, septiembre supone un comienzo que se llena de sueños, frentes y nuevas oportunidades. Pero este septiembre es diferente. Aunque apenas ha empezado, ya viene marcado por seis meses de pandemia global y uno de los mayores incendios de Andalucía de los últimos años en nuestro entorno más cercano. Ambas son situaciones sobrevenidas y dolorosas que, en distinto grado, lo primero que generan es un frenazo en seco.
En los inicios de la COVID-19 en España, durante el frenazo, teníamos la certeza de que cambiaríamos nuestra forma de movernos, relacionarnos y vivir. Ahora, lo que esperan muchas personas es que esto pase cuanto antes para volver a esa normalidad llena de reuniones, carreras, viajes, consumo y desconexión con lo que realmente nos hace felices.
No quiero ser hipócrita, reconozco que me siento cómodo en el viaje y la velocidad. Lo llevo haciendo desde hace años, pero ahora, como me decía ayer un amigo, parece que a muchas aves las han enjaulado para no volar más. Sin embargo, debo admitir que estamos construyendo tiempo de calidad para una vida personal y profesional significativa. Esa vida por la que tanto suspiramos y que ahora que la tenemos más cerca, despreciamos ansiando volver a la rueda del pasado.
Por eso, recurrimos de nuevo a nuestra resiliencia para construir desde este mes la nueva realidad de AlmaNatura, un modelo mejorado que da ahora sus frutos pero que ha sido motivo de reflexiones y meses de trabajo por parte de los diferentes equipos internos y de proveedores que impulsan nuestro renovado propósito: “Construir oportunidades para mejorar la calidad de vida del mundo rural y combatir la despoblación”.
Reflexiones que han dado pie a cambios estratégicos en nuestra organización:
- La importancia de la sencillez. Diseñamos nuestro proyecto de coworking en el antiguo molino de aceite de nuestro pueblo —Arroyomolinos de León (Huelva)—, con el fin de convertir este espacio en un lugar regenerador para la población local y los visitantes que vengan en modo teletrabajo. Un espacio que atienda las necesidades locales y comarcales desde el empleo, la salud, la educación y el uso de la tecnología. Para ello, daremos prioridad a acciones como la creación de un jardín con plantas endémicas, programas que mejoren el empleo o actividades culturales transformadoras. Las obras comienzan este mes con la consolidación y rehabilitación de la sala de molienda.
- Desacelerar para volver a lo cercano. Durante los últimos años hemos construido iniciativas con una proyección, envergadura e impacto social que trascendía nuestro entorno más inmediato. Estamos orgullosos de lo conseguido y continuaremos haciéndolo, pero reduciremos marchas para volver a poner el foco en nuestra comunidad. A partir de este mes tenemos el placer de presentaros una nueva organización que potencia nuestro propósito, se trata de la Fundación AlmaNatura. Una organización que comenzará a desarrollar iniciativas en pro del bien común rural y cuyo objetivo principal es la reactivación social, ambiental y económica de las zonas rurales, comenzando por nuestro pueblo. Os contaremos mucho más en la presentación que el 1 de octubre realizaremos en directo.
- Cambios para generar acción. Acciones para generar cambio. Durante estos meses hemos reflexionado en videoconferencias, jornadas online y otros encuentros en multitud de formatos, ahora resulta clave pasar a la acción. Materializar el cambio que queremos es tan importante como reflexionar lo que queremos cambiar. Los últimos meses nos han generado un sueño colectivo, necesario, pero insuficiente para pasar al siguiente nivel. En AlmaNatura hemos aprendido que si queremos seguir propiciando cambios positivos, la regeneración de nuestro modelo debe ser continua. Por ello, este mes también os presentaremos la nueva web que se ha construido con la intención de generar nuevas alianzas que transformen el mundo rural, seguir compartiendo contenido de utilidad para el cambio de paradigma rural que precisa el mundo y mostrar que una economía más humana es posible e incluso rentable.
Además, continuamos nuestro trabajo en GIRA Jóvenes, mediante la capacitación personal y profesional dirigida a ayudar a los jóvenes a descubrir las oportunidades laborales del entorno e impulsar su papel como agentes de cambio. También continuamos con el proyecto Holapueblo, una plataforma que busca conectar a personas que desean hacer realidad su proyecto de emprendimiento en una zona rural, con pueblos en búsqueda de nuevos habitantes y del que ya tenemos los primeros frutos del trabajo realizado. Y pronto traeremos una nueva edición de GIRA Mujeres, un proyecto innovador dirigido a impulsar la capacidad emprendedora de la mujer a través de talleres de empoderamiento personal y profesional.
En la cocina tenemos tres grandes proyectos que conoceréis a lo largo de los próximos meses, proyectos que dan respuesta a la problemática del desempleo mediante un modelo de emprendimiento social, una comunidad de prácticas para el profesorado rural y un necesario proyecto de salud que esperamos que llegue a centenares de personas que lo necesitan.
Sé que es difícil hablar de planes para el futuro cuando hay tantas personas pisando sobre cenizas. Miles de vidas están afectadas por las circunstancias, y no queda más remedio que remangarse. Ahora más que nunca se hace patente la necesidad de una nueva lógica de construir negocios al servicio de las personas. Nosotros llegamos a septiembre 2020 con los deberes hechos y la energía necesaria para hacer frente a un mundo cambiante lleno de desafíos. ¿Nos acompañas?