No se si alguna vez lo has pensado pero para muchos de los que andamos por aquí sería nuestro sueño. A veces, incluso siendo consciente de ello se nos hace casi imposible no caer en la tentación y acabar siendo un turista más. Aunque claro, tal vez para muchos/as de los que estén leyendo este post ser turista no sea malo. Por supuesto lo respetamos, pero nos referimos más bien a la importancia de no parecer un turista que no respeta las tradiciones y una de esas personas que en ocasiones sólo quiere buscar una fotografía, cueste lo que cueste.
Por ello hemos pensado en algunas pautas para seguir siendo un turista pero sin parecerlo. Enumeramos:
1. Respetar las tradiciones, el medio más cercano y las costumbres locales.
2. Involucrarnos en las tareas y festividades de la zona que visitamos.
3. Comprar en pequeños establecimientos fortaleciendo así la economía local.
4. Reconocer el valor de las personas que viven allí por conservar y seguir viviendo con sus costumbres y tradiciones.
5. Agradecer el cariño y comportamiento de los lugareños/as pues somos nosotros los que venimos de otro hábitat.
Seguro que también se te ocurren algunas pautas. Lo importante es saber que es todo un regalo poder compartir con esas personas la experiencia de descubrir lo desconocido para nosotros/as. ¿Nos ayudas a seguir con algunas pautas más?
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